Adriana Pacherres de AINIA

Almazaras sostenibles: el proyecto SAPAL facilita la digestión anaerobia de los alperujos

En el marco del 17º Congreso Internacional de Bioenergía, Adriana Pacherres, técnica de I+D en AINIA, presentó el proyecto SAPAL, una novedosa solución tecnológica para “biorremediar” los subproductos generados en la producción del aceite de oliva en almazaras (alperujo y hojas de olivo), transformándolos en productos útiles y respetuosos con el medio ambiente como biofertilizantes y bioenergía.

Este proyecto CDTI es fruto de la colaboración entre las empresas Oleostepa y Genia Bioenergy y cuenta con la colaboración de AINIA como partner tecnológico.

Convertir lo que hasta ahora es un problema ambiental en una solución sostenible y circular

Entre estos subproductos, el alperujo, compuesto por hueso, orujo y alpechín, presenta una alta concentración de taninos, polifenoles y grasas que dificultan su gestión debido a su carácter contaminante y a la inhibición que ejercen sobre los procesos de digestión anaerobia. En España se producen entre 5 y 9 millones de toneladas de alperujo cada año y en corto espacio de tiempo, lo que dificulta aún más su gestión, explicó Pacherres.

La innovación del proyecto SAPAL radica en la selección de microorganismos específicos para la digestión anaerobia, resistentes a elevadas concentraciones de polifenoles, y en el empleo de fermentadores en estado sólido para mejorar la eficiencia de la biorremediación. De esta manera, se posibilita aprovechar el alperujo para la producción de biogás y compost.

Con el objetivo de mejorar la viabilidad técnica y económica del proceso, AINIA ha realizado ensayos de toxicidad y biodaptación de las cepas bacterianas a los polifenoles en digestores anaerobios y de bioaumentación para aumentar la producción de biogás.

Para la industria del aceite de oliva, que tradicionalmente enfrenta problemas en la gestión de residuos, el proyecto SAPAL ofrece una alternativa viable y sostenible. Al transformar los subproductos en recursos aprovechables, esta tecnología reduce los costes de gestión de residuos, facilita el cumplimiento de normativas ambientales y abre nuevas oportunidades de mercado para las almazaras dentro de la economía circular.

Pacherre presentó los resultados de estos ensayos en su ponencia en el Congreso Internacional de Bioenergía, celebrado en octubre de 2024.