La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha anunciado un nuevo marco normativo que regula la conexión de instalaciones de producción de gases renovables —como el biometano o el hidrógeno verde— al sistema gasista. La medida, anunciada en su Circular 2/2025, busca simplificar y acelerar el proceso de integración de estos gases en la red en un momento de impulso a la descarbonización de la economía en España.
Actualiza el proceso de tramitación de las solicitudes de acceso y conexión de instalaciones de producción de gases renovables —como el biometano y el hidrógeno— a las redes de transporte y distribución de gas natural.
El nuevo marco normativo, publicado en el BOE el 16 de abril, actualiza el proceso de tramitación de las solicitudes de acceso y conexión de instalaciones de producción de gases renovables a las redes de transporte y distribución de gas natural. Entra en vigor este mismo mes y representa un paso decisivo para facilitar la integración de estos gases en el sistema energético español.
Este nuevo procedimiento sustituye al aprobado en 2016 y responde a la necesidad de adaptarse al creciente interés por los gases renovables, alineándose con la normativa europea más reciente: el Reglamento (UE) 2024/1789 y la Directiva (UE) 2024/1788, actualmente en proceso de transposición en España.
Novedades del nuevo marco para acelerar la conexión de gases renovables a la red
Mayor transparencia y homogeneidad: se establecen criterios técnicos y administrativos uniformes para evaluar las solicitudes de conexión, lo que reduce la incertidumbre para los promotores de proyectos.
Información accesible: los operadores deberán publicar en sus webs información clave sobre la capacidad de inyección y los puntos viables de conexión, facilitando la planificación de nuevos desarrollos.
Coordinación entre redes: se refuerza la colaboración entre los operadores de transporte y distribución, especialmente en aquellos casos donde se requiera una conexión simultánea a ambas redes.
Figura del punto de entrega virtual: se regula esta nueva modalidad que permitirá a varios productores compartir una infraestructura de conexión, lo que puede resultar clave para viabilizar proyectos en zonas rurales o con menor densidad industrial.
Desde la CNMC señalan que esta regulación “sienta las bases para el despliegue masivo de los gases renovables” en la red gasista española y contribuye a los objetivos del PNIEC, que fija una inyección de 10,4 TWh anuales de biometano en 2030.
Con esta iniciativa, España avanza hacia un marco regulador más ágil, transparente y favorable para los inversores y promotores del sector del gas renovable. Un movimiento esperado por la industria que llega en un momento clave para desbloquear numerosos proyectos actualmente en tramitación o búsqueda de financiación.